domingo, 30 de diciembre de 2012

PLAIAUNDI. SERAPIAS CORDIGERA



Como es lógico al pensar en Plaiaundi , la marisma o mejor lo poquito que queda de ella, nos vienen a la mente las limícolas, las marinas u otras aves del humedal . Sin embargo hay un pequeño espacio para la flora y especialmente para la relacionada con   las aguas salobres de la marisma que más adelante trataré de detallar. Ahora me ocupa una orquídea (otra de mis pasiones) quizás menos importante pero si muy bella.



Esta orquídea del género Serapias no trate posiblemente en su afán reproductor de atraer a los insectos con olores o feromonas, sino que trate de darles cobijo, generalmente abejas, pues su temperatura es 2 ó 3 grados superior en su interior hasta donde estos acuden con la lluvia o la noche primaveral a resguardarse


miércoles, 19 de diciembre de 2012

PLAIAUNDI. ZAMPULLÍN CUELLINEGRO


                     El parque ecológico de Plaiandi, enclavado en la bahía de Txingudi, es un pequeño espacio residual en el conjunto de una marisma densamente humanizada, de este enclave transfronterizo. Ocupando una minúscula parte de la marisma original es de suma importancia especialmente para las aves. Algunas residentes , otras se detienen unos días o semanas para reponer fuerzas en su  camino , incluso pasan gran parte del invierno y las menos se reproducen en este nuestro pequeño rincón.
                     Cabe reseñar que aquí en Plaiaundi este ave no suele verse en las balsas del interior del parque siendo más habitual su presencia en las aguas saladas del estuario o la ria de Jaizubia.













viernes, 7 de diciembre de 2012

LA SELVA DE IRATI. ROSALIA ALPINA


                        Tiene nombre de flor  este inseto de largas antenas que parecen cuernos, de aquí el calificativo de “longicornes” que reciben los cerambícidos. Esta familia de escarabajos utiliza la madera muerta en descomposición para morada de sus larvas de la que se alimentan hasta completar su desarrollo y convertirse en adultos.


                           La Rosalia Alpina no pasa indiferente para nadie, sus tonos azulados nos sorprenden al avistarla. Sus grandes “cuernos” junto con la gracilidad con que se desplaza por los troncos de las hayas, de abajo a arriba o de arriba abajo, cual actriz del cine cómico a cámara rápida.


 En otras ocasiones tomando el sol tranquila “con la seguridad que su cornamenta  le proporciona” se deja contemplar a placer posando par la prensa como una actriz afamada.


  Otras veces la vemos desplazándose sin más, al son que sus antenas marcan y sólo cuando se siente insegura despliega el vuelo que puede tener apariencia de inseguro pero rápido como un autogiro hasta seguridad de las ramas más altas



                        Una hermosura que aún parece que se deja ver, unos años más que otros, por la maravillosa Selva de Irati